miércoles, 17 de noviembre de 2010

SuMmEr

Alfons Maria Mucha 1896.

jueves, 29 de julio de 2010

....... me gusta ver como el calor de la estufa deforma la realidad de la ventana.

El margen del invierno

Tus ojos,
puros como cristales,
me atraviesan y me leen.
desnudando al ser
que en esencia soy
mas allá del tiempo y del mundo.

Recostados en la noche fría
los roces minúsculos
se tornaban contactos eternos.

Dos complejos sujetos
se convertían a la simpleza.

Hombre y mujer
unidos pero distantes
descansaban
mientras el viernes
comenzaba su marcha
con su ruidoso paisaje.

De pronto me descubrí
tan feliz en su compañía
que ahora me es imposible
renunciar a ella.

Muero por atacarte
como una fiera a una presa.
me contengo por no poder
protegerte de mi luego.

Entre nosotros nació
una primavera
en el margen devastador del invierno.

y el mundo se detuvo allí...

¿en qué momento la amistad nos abandona?

¿cuándo se derribó el muro que ahora nos permite
encontrarnos como sujetos nuevos?

¿cómo será poder amarte?

Desvanezco de ansiedad.
Tal energía me hace torpe
y se traduce en mis palabras fallidas
.

las presas

Perdí esa oportunidad
que vino a mi
tan sencillamente.

Tras sacarse los anillos
se acercó
se rió
me rodeó y acorraló.

Yo, como su presa animal,
huí como gacela
y salí liviana del ataque.

Luego al conversar
él era la presa
y yo la atacante.

viernes, 26 de febrero de 2010

3

las 3
es el el tiempo
en el que reina el silencio.

Es cuando la noche
es sustancialmente noche
y el silencio
inherentemente silencio

Es lo verdadero
(¡y lo vacío!)

Y con esta alegría insana
de vivir así...
te recuerdo en forma circular
en el vaivén de mi mente
que gira,roda...
se arrastra
y de última baila.
Es estúpida la idea de que pienses en mi.

Una mentira seductora,
una idea...tus palabras

El creer o no
es el debate perpetuo,
es el protagonista
de muchas noches en vela.

Esa lucha que implica tantas energias

Mis pensamientos ruedan
uno tras otro
inconexos y nublados.

Mis ojos y mejillas
ya no son los de ayer

El detalle

Paranoica
me enredo en esas cosas
que me frecuentan...
que se avanzan ante mis ojos...
que parecen tener
una maldita finalidad última
verdadera y total.

Carteles, melodías, conversaciones
me acechan,
haciéndome tan vulnerable y frágil
como una doncella griega.

El detalle es lo que mata
y lo que vence toda intencionalidad inicial.
Del detalle no se escapa,
sólo lo podemos ignorar un rato.

cielo verde

Este es el verano
mas cínico y sabio.

Así como los sujetos
corporalmente inquietos
encuentran su placer
en la siesta;
tu mente agitada
embrollada y movediza
descansa en el cielo verde.

Allí en las alturas
te mueves,
ríes y bailas
con gracia tan grande
como la de
los escritos antiguos

Tus gestos se endulzan.
Te trasformás en tan solo piel,
tacto.
y en el final, por desgracia,
eres mente.

Si no fuera por tu mente habrías sido mio más de una vez.